Es evidente que en este medio nos oponemos a los tratamientos genéticos conocidos como vacunas. No los llamamos terapias porque las terapias tratan de curar y es más que dudoso que la finalidad de estos tratamientos sea la de curar.
Pero la aplicación de los tratamientos genéticos a los niños es especialmente malvada. Y ello por varios motivos:
- El riesgo de muerte o incluso entrada en UCI de los niños sin patologías previas es prácticamente inexistente.
- Los niños tienen una expectativa de vida mayor, por lo que los efectos secundarios tienen mucho más tiempo para desplegarse.
- El conocido efecto negativo para la procreación es especialmente dañino en el caso de los niños, que aun no han tenido la posibilidad de procrear.
- Al no tener posibilidad de decisión propia, los niños tienen que asumir en su cuerpo las consecuencias de la decisión de otra persona.
- La discriminación de los no vacunados que es un hecho en el caso de los mayores, es mucho más dañina en el caso de los niños, por no tener estos el mismo cuidado al exponer las cosas y ser mucho más perjudiciales las consecuencias de la discriminación de la masa al disidente.
A pesar de ello, las autoridades españolas en diversas comunidades autónomas están planteando la vacunación de los niños. Y no contentos con ello, encima plantean hacerlo en los colegios, donde el control de los padres es más difícil y donde el señalamiento del no vacunado será todavía mayor.
Ante esta indignidad hay que decir basta. Debería ser toda la sociedad la que lo dijera, pero en este mundo en el que la cordura ha desaparecido, si no hay una solución general, debemos ser al menos los padres los que tracemos una línea en el suelo y nos neguemos a cruzarla.
No a la vacunación de los niños.
Si deseas negarte a que vacunen a tu hijo, puedes usar este modelo de carta que hemos encontrado en las redes, para comunicar al colegio tu intención , y las consecuencias en caso de ignorar tu carta. Es una carta dura, así que quizá quieras rebajarla un poco o quizá no. En cualquier caso es mejor que muestres tu oposición, no sea que cuando quieras hacerlo sea ya demasiado tarde.